Algunos parecen fieros pero son afables.
Algunos parecen tímidos pero son despiadados.
Mira más allá de las apariencias;
Posiciónate para tu ventaja.
Sin experiencia, somos fácilmente engañados por las apariencias. Un hombre grandote habla fuerte, así que lo juzgamos insensible y beligerante, pero puede resultar ser bastante amable. Si lo abordamos a la defensiva, puede que no notemos sus puntos buenos. Por otro lado, cuando conocemos una mujer pequeña y callada, podemos volvernos complacientes en nuestra actitud. Si ella resulta ser una persona traicionera, nuestro relajamiento contribuye a nuestra victimización.
A veces las personas son exactamente como parecen ser. Otras veces, están sólo mostrando un camuflaje.
Los seres humanos, como los animales, tienen distintas estrategias de supervivencia. Color, movimiento, olor y otros, son todas maneras en que los animales practican el engaño. La gente no es diferente. Prometen una gran cantidad de cosas, pero rara vez cumplen. Proclaman amistad para toda la vida, y aún así nunca vuelven. Te prometen muchas cosas, pero están sólo buscando una manera de aprovecharse de ti. Debemos aprender a discernir claramente las personalidades de los demás, a pesar de las fachadas que proyectan.
Posiciónate de la manera más ventajosa en todo momento. Usa la experiencia para penetrar las artimañas de otros. Esa es la forma correcta de arreglárselas con las apariencias.
Algunos parecen tímidos pero son despiadados.
Mira más allá de las apariencias;
Posiciónate para tu ventaja.
Sin experiencia, somos fácilmente engañados por las apariencias. Un hombre grandote habla fuerte, así que lo juzgamos insensible y beligerante, pero puede resultar ser bastante amable. Si lo abordamos a la defensiva, puede que no notemos sus puntos buenos. Por otro lado, cuando conocemos una mujer pequeña y callada, podemos volvernos complacientes en nuestra actitud. Si ella resulta ser una persona traicionera, nuestro relajamiento contribuye a nuestra victimización.
A veces las personas son exactamente como parecen ser. Otras veces, están sólo mostrando un camuflaje.
Los seres humanos, como los animales, tienen distintas estrategias de supervivencia. Color, movimiento, olor y otros, son todas maneras en que los animales practican el engaño. La gente no es diferente. Prometen una gran cantidad de cosas, pero rara vez cumplen. Proclaman amistad para toda la vida, y aún así nunca vuelven. Te prometen muchas cosas, pero están sólo buscando una manera de aprovecharse de ti. Debemos aprender a discernir claramente las personalidades de los demás, a pesar de las fachadas que proyectan.
Posiciónate de la manera más ventajosa en todo momento. Usa la experiencia para penetrar las artimañas de otros. Esa es la forma correcta de arreglárselas con las apariencias.
Rosa, amiga cuánta razón tienen tus palabras...
ResponderEliminarAsí somo...
Todos llevamos una mascara.
Por eso es mejor no juzgar esas apariencias y utilizar siempre la prudencia y discreción. El tiempo irá mostrando la verdad, que muchísimass veces no es la que veíamos.
ResponderEliminarUn saludo
Escriben que dijo mi Señor: Sed, pues, prudentes como las serpientes y sencillos como las palomas.
ResponderEliminarSólo en la medida que consigamos ser libres, iremos consiguiendo al mismo tiempo ser sinceros y veraces. Porque la libertad nos hará capaces de buscar el bien y la verdad, ya que siendo verdaderos seremos libres.
ResponderEliminarSer auténtico nos exige desapegarnos de todas nustras ataduras, debilidades, vicios, esclavitudes, porque sólo así seremos capaces de vernos tal y como somos.
Un abrazo.
Rosa, no APARENTAR... SER!! Se vive mucho más tranquilo así... Sintiéndolo mucho no comparto la opinión de Chache: creo que no todos llevamos una máscara... conozco a muchos que van por la vida con la cabeza alta, la mirada limpia y el corazón transparente. Además según como te muestras las máscaras desaparecen, incluso se desintegran...
ResponderEliminarSaludos cordiales para ti, para Chache y para tod@s...
bueno Rosa, no es fácil.A veces esas mascaras están tan profundas en el alma, que ya son parte de ellas y bien difícil de arrancar
ResponderEliminarYo suelo dejarme llevar por el pálpito...pero igual me llevo de vez en cuando un chasco jaja
Besotesss
Gizz
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ResponderEliminarTodos llevamos máscaras, a veces es cuestión de práctica, saber si es por timidez o falsía.
ResponderEliminarTe dejo un saludo.